Nuevas constelaciones
Constelaciones familiares cuánticas
¿Te interesan las nievas constelaciones?. También llamadas constelaciones cuanticas. En este artículo te comparto como se llegaron a ellas y los beneficios que aportaron a la terapia sistémica. Para ello, es necesario saber un poco sobre los pasos anterior, es decir, sobre las constelaciones familiares.
Este texto está inspirado en base a un taller de nuevas constelaciones que realicé junto a Brigitte Champetier en su centro constelaciones familiares “insconsfa”. La autora detalla su recorrido durante años al lado de Bert Hellinger y su propio camino abriéndose a lo nuevo como facilitadora de constelaciones familiares cuanticas.
1- Constelaciones cuánticas:
Estar en sintonía con la vida como es, asentir, agradecer a la vida como es, produce un salto cuántico en nuestras vidas. Produce la sanación.
El asentimiento y el agradecimiento son fuerzas del campo del espíritu, del centro vacío o del gran Campo, previas a los órdenes del amor. Son fuerzas que sanan los órdenes del amor y sanan nuestras vidas.
Lo que Bert Hellinger llama el amor del espíritu es la visión de la vida sobre el que el nuevo paradigma descansa: la visión cuántica de la vida.
Por un lado nuestra mirada de observador neutro, que lo ve todo con amor, agradecimiento y respeto, cambia lo que ve y a la vez es transformado por lo que ve. La sanación se transforma en un bucle de resonancia sin fin, una espiral de sanación.
Por otro lado, ahora sabemos que somos energía, y que todo es a la vez partícula y onda. Junto a cada partícula o realidad materializada (desplegada) existe un océano “implicado”, un océano de otras probabilidades. El salto de la partícula a otra onda de probabilidad se da cuando el observador deja de mirar la partícula y no sabe qué va a pasar; se da cuando su mente está vacía.
En nuestra vida, las cosas cambian cuando dejamos de mirar el problema, cuando lo aceptamos plenamente, para después soltarlo, dejar de pensar en él, abrirnos a la vida como es, desde la aceptación incondicional, el agradecimiento y el respeto. El problema se transforma en otra probabilidad, siempre mejor para todos que la anterior.
Hablo de constelaciones cuánticas cuando la persona primero se sitúa en observadora de su vida, aceptando ver todo, agradeciendo y honrando todo, luego decide despedirse de su pasado y elige la vida con lo que le toque, con una sensación profunda de agradecimiento a la misma vida.
La constelación se inicia con los representantes que hagan falta. La persona puede seguir sentada o ser representante de su yo evolucionado, que lo ve todo como es, ve su vida con todas sus intrincaciones, lo ve todo, lo honra todo y lo agradece todo. Esta misma persona, desde su silla, agradece el pasado y lo deja atrás. Y decide conectarse con el agradecimiento a la vida, con el centro vacío, para poder llegar a pronunciar frases como “elijo la vida” hasta que mire exclusivamente la vida y vaya hacia ella.
Entonces se produce el “milagro”. Cuando la persona elige con toda su fuerza vivir la vida como es, el pasado se sana y la libera. Los ancestros, uno tras otro, van tumbándose y cerrando los ojos. Suelen comentar la liberación, la paz o la alegría que les da esa frase. Algunos muertos relatan incluso que viven un profundo proceso de transformación al servicio de la vida. Ya no hace falta hurgar entre los ancestros para sanarlos. Ya no se debe saber quiénes son. Solamente verlo todo, agradecer y dejarlo atrás para entregarse al Campo de punto cero, a la Vida como es, desde el amor, sin intención.
Y la fuerza que entra en la persona y en el campo entonces es máxima.
De esta manera hemos salido de la polaridad “estar bien / estar mal”, el observador lo mira todo con amor y agradecimiento, y al hacerlo su vida cambia de frecuencia, sale de la polaridad, da un salto a algo distinto y siempre mejor: hacia más vida y más conciencia. Estas son constelaciones cuanticas.
2- Constelaciones sistémicas
Dentro de la evolución de las Nuevas constelaciones, las constelaciones familiares desde el centro vacío, fuimos guiados hacia constelaciones sin ancestros, solamente centradas en el momento presente, en las que los representantes se representan a sí mismos. La resonancia entre los presentes es la que actúa y la fuerza que nace en el campo durante estas constelaciones es inmensa, principio de la terapia sistemica familiar
Hemos podido experimentar que algunas veces se nos pide empezar con representantes de los ancestros del cliente y en algún momento, modificar la consigna, para pedir que cada uno cuando se sienta empujado a representar y participar en la constelación, lo hará representándose a sí mismo. Y en otras ocasiones, el constelador tiene la información de empezar la constelación directamente con los representantes representándose a sí mismos.
La resonancia entre los presentes va a sanar el pasado sin necesidad de hacerlo aparecer. Poniéndonos al servicio de terapia de constelaciones familiares.
La resonancia entre las personas tiene un efecto sanador sorprendente: cuando dos personas están en fase, en sintonía, su energía se duplica…
La exigencia para los representantes de estar centrados es mayor todavía. Pues es difícil no interferir uno mismo con su intención, por ejemplo acariciar alguien que sufre, querer ayudar, etc…
Interferir así desde nuestra emoción, en lugar de ser canal del centro vacío, va a quitar fuerzas a la persona ayudada, e incluso le va a quitar las ganas de decidir algo distinto.
Al iniciar una terapia constelación familiares a veces el constelador siente que no tiene permiso para sacar a los ancestros de la persona y que la sanación vendrá por resonancia con los vivos. O bien simplemente recibe la información de que la fuerza sanadora para la persona está en la resonancia con los presentes.
Terapia de las nuevas constelaciones se inicia de la misma manera que la familiar, con un representante o dos (la persona y su tema). Se deja que la constelación se despliegue, algunos de los presentes se sienten impulsados a representar a alguien, a algún ancestro, algún excluido o muerto.
Cuando el constelador tiene la información de que lo importante se ha mostrado, los ancestros que necesitan ser vistos ya están representados, aunque no sepamos quienes son, llega el momento de dar una nueva consigna para el resto del grupo: siguen estando al servicio del cliente que se constela en taller de constelaciones, entregándose a algo más grande y se añade: “ahora os vais a representar a vosotros mismos”.
Algunos representantes entonces estarán embargados por el campo y vivirán diversos movimientos que poco a poco permitirán la sanación del cliente. La resonancia que se ha creado entre cada representante y la situación del cliente hace que estos representantes también habrán sanado lo que tenían en común con el cliente.
El pasado se sana por el movimiento de los vivos en esa constelacion grupal.
Hemos experimentado otra manera de utilizar la constelación sistémica. Todo el grupo se pone en resonancia. Cada uno es sí mismo, entregándose al centro vacío y al movimiento centrado. El movimiento de sanación se irá dibujando gracias a la relación profunda que se irá desarrollando entre las personas y todo el grupo. Esta relación permite que sus resonancias se vayan sincronizando, hasta llegar a nuevos movimientos.
Observamos la alternancia de movimientos de individuación y de cohesión: en un primer tiempo cada uno busca su lugar, su expansión, su dirección, relacionándose con uno, con otro, acercándose, separándose, hasta sentirse cómodo y buscando el pertenecer con todos. A partir de ese momento, vemos que todos están al servicio de un nuevo orden, una nueva pertenencia. Todos pertenecen a este nuevo orden, y todos esperan a todos, sin ningún deseo de forzar el ritmo de los demás.
Nos damos cuenta como nuestras vidas están al servicio de esta pertenencia de todos. Conforme se incluyen más personas, mas fuerza se experimenta en todo el grupo y en cada uno.
Si se da mas tiempo al movimiento, una vez todos en círculo aparece una segunda etapa: poco a poco varios individuos se van separando, experimentando una nueva autonomía que creará a su vez una nueva pertenencia de todos, cuando todos alcancen esta nueva individuación. Los representantes experimentan todas las dificultades de la toma de autonomía: miedo, culpa, soltar sólo un brazo (es interesante para cada uno observar qué brazo), avanzar sólo un pie… hasta el descubrimiento de una nueva luz, un nuevo camino y un nuevo pertenecer.
Podemos utilizar la constelación sistémica con un grupo entero, o de dos en dos, cada uno haciendo de su tema o de sí mismo, dejándose mover como si fuera representante de sí mismo.
Los resultados de estas constelaciones sistémicas por ahora son más potentes todavía que las constelaciones “familiares” en las que intervienen los ancestros, y la solución de los presentes depende del pasado. Ahora el presente depende del presente.
Nuevas frases surgen del campo:
- El destino no es individual, estamos todos juntos
- Todos pertenecen
- Hay para todos
- Cada uno tiene su tiempo
- Hay un lugar para cada uno, para cuando decidas tomarlo
- Todos te esperaremos el tiempo que necesites
- Cada uno decide para/por sí mismo
- Aquí somos todos adultos
3- Nuevas constelaciones familiares:
En las nuevas constelaciones, habitualmente empezamos la constelación con un representante para la persona y otra para su tema, según la información que reciba el constelador del centro vacío.
A partir de ese momento, pido a los presentes que se entreguen al centro vacío y se pongan al servicio de la vida del cliente. Si se sienten empujados por alguna fuerza externa para representar, lo hacen, sin saber a qué ancestros van a representar.
Llega un momento en el que “el movimiento del alma” se ha dibujado. En que todos los ancestros intrincados en la vida del cliente han hecho su aparición y se muestran.
Entonces llega una nueva etapa en la constelación. A todos los presentes, incluido el cliente, les digo que a partir de ese momento miren todo, honren todo lo que ven y agradezcan todo. Al grupo les digo que si se sienten empujados a representar será representándose a sí mismos. Será su propia resonancia la que actuará como fuerza de sanación.
Si hace falta el cliente se levanta para honrar, incluir y agradecer lo que ve. El constelador le guiará.
En un determinado momento el constelador siente que es necesario dejar la “partícula”, el pasado, el sufrimiento y abrirse al presente y a las nuevas posibilidades.
Ya no somos los encargados de sanar a nuestros ancestros. Sólo debemos vivir, vivir con lo que nos toque, y milagrosamente todo empezará a sanarse.
Entonces el constelador pide al cliente y a los demás que se entreguen de nuevo al centro vacío, al silencio, al agradecimiento y la alegría, para que luego den las gracias al pasado, que se despidan de él y que digan “ahora elijo la vida”, abriéndose a la vida, al futuro, tal y como salga. Todos dirigen entonces la mirada hacia la vida, con decisión y agradecimiento. Ayudando a que se produzca la sanación en la vida de la persona.
Al cliente se le puede solicitar que diga “ahora elijo tener fuerza”.
La energía en el campo está a su máximo cada vez que alguien pronuncia esta frase: ELIJO LA VIDA. Todo se transforma.
Y descubrimos que la clave de la sanación está en nuestra decisión, en nuestra elección, sea cual sea el peso anterior. El pasado se sana gracias a nuestra aceptación, no por nuestro trabajo sobre él…
La evolución actual de las Nuevas Constelaciones es por tanto la fusión de los tres tipos de constelaciones: familiar, sistémica y cuántica.
La representación será o familiar o sistémica. Mientras los ancestros necesiten ser vistos, los representantes serán ancestros del cliente, o energías. En cuanto el campo nos lo pide, dejamos de representar a otros, para sólo estar presentes desde nuestra resonancia. Y esta resonancia creará la sanación entre ambos: cliente y representante.
Y el paso decisivo está en la actitud cuántica:
- El cliente se entrega al centro vacío y decide
- Observar todo, con respeto y agradecimiento. Quizás necesite elegir ver.
- Despedirse de todo el pasado, y si hace falta ayudarse de la frase “tú por ti y yo por mi”.
- Abrirse de nuevo al centro vacío y a la vida como es, desde la alegría y el agradecimiento, sin deseo, entregado.
- Elegir la vida, la vida como es. A veces necesitará elegir la fuerza, aceptando sentir a su padre (o bajo su pie derecho o detrás de sí).
La evolución del movimiento del espíritu hoy nos muestra que este movimiento de sanación está en nuestra elección por la vida. Ahí está la sanación. Nuevas constelaciones nos ha entregado este conocimiento.
4- La vida. Bert Hellinger:
Algunos sabéis que Bert Hellinger falleció en el año 2019. Tuve la fortuna de poder acudir a algunos de su taller de nuevas constelaciones en su última etapa y disfrutar de su misión de expandir la filosofía de las constelaciones familiares cuanticas. En una de las formaciones que realizó en 2016, conocí en México a la mujer con la que estoy casado (estoy escribiendo este texto en 2023).
La vida de Bert Hellinger y su periplo hasta convertirse en el padre de las constelaciones familiares está llena de cambios, transformaciones personales, despedidas, desamores, desprecios hacia su persona… Su vida, como la de muchos otros, no fue nada fácil.
Os dejo un poema sobre la vida que nos dejó a todos:
«La vida te aleja de las personas que amas hasta que comprendes que no somos este cuerpo, si no el alma que él contiene.
La vida se ríe de ti tantas veces hasta que dejas de tomarte todo tan en serio y te ríes de ti mismo.
La vida te rompe, te quiebra en tantas partes como sean necesarias para que por allí entre la luz.
La vida te enfrenta con rebeldes hasta que dejas de tratar de controlar.
La vida te repite el mismo mensaje incluso con gritos y bofetadas hasta que por fin escuchas.
La vida te envía rayos y tormentas para que despiertes.
La vida te humilla y derrota una y otra vez hasta que decides dejar morir tu ego.
La vida te niega los bienes y la grandeza hasta que dejas de querer bienes y grandeza y comienzas a servir.
La vida te corta las alas y te poda las raíces hasta que no necesitas ni alas ni raíces, si no solo desaparecer en las formas y volar desde el ser.
La vida te niega los milagros hasta que comprendes que todo es un milagro.
La vida te acorta el tiempo para que te apures en aprender a vivir.
La vida te ridiculiza hasta que te vuelves nada, hasta que te haces nadie y así te conviertes en todo.
La vida no te da lo que quieres, si no lo que necesitas para evolucionar.
La vida te lastima, te hiere, te atormenta, hasta que dejas tus caprichos y berrinches y agradeces RESPIRAR.
La vida te oculta los tesoros hasta que emprendes el viaje, hasta que sales a buscarlos.
La vida te niega a Dios hasta que lo ves en todos».
Bert Hellinger 1925 – 2019
En uno de los últimos talleres que estuve con Bert Hellinger y Sophie en México, él mismo nos pidió públicamente que le dejáramos descansar en paz. Hoy sabemos gracias a su trabajo en nuevas constelaciones familiares como hacerlo.
Gracias de todo corazón.
Descansa en paz.
5- Conclusión
Hacer una constelación de las nuevas constelaciones pueden ayudarte a lograr cambios que necesitas. Ahora ya sabes el lo potentes que son las constelaciones familiares cuanticas.
Si quisieras transformar esa parte de ti, esa relación del pasado con tus ancestros y hacer tu vida más ligera, cuando estés listo y sientas que es tu momento, yo puedo acompañarte como constelador familiar tomando el legado que mis maestros me han dejado para ponerme al servicio de tu sistema familiar de la mano de las constelaciones familiares.
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